Todo sentimiento es poético, no todo poema es sentimental.

Hay que romper un poco con esa idea de formalizar los sentimientos.
Las palabras tienen la característica de ser impersonales, de hecho son artificiales. No soy cuidador de palabras, ni amante de ellas.
Por eso, cuaquier palabra que sea creada y movida por el sentimiento, es personal, chevere y verdadera.
Mientras se escriba con la pretensión de ejecutar un oficio, la palabra deja de tener entrañas.
No por eso se puede justificar la falta de seriedad en el expresar de la palabra, así sea dejada sobre un pedazo de servilleta.

Y los que se digan poetas son unos pendejos... No hay poetas, sólo poesía.

Todos, hacemos poesía.

domingo, 2 de mayo de 2010

Aguardo antes de irme

Voy a ponerme a hacer un poema
Antes de irme,
A decirme algo para convencerme,
Prometo
No excusarme ni arrepentirme.

Voy a decir tantas cosas
Que al cuarto no le quepa nada más
Para que no sienta que es sobrevivencia,
Que esta se vuelva una dulce penitencia.

Voy a inundar de lágrimas mis pestañas
A hacerme amigo de mis mejillas
A clonarme en lejanas alteridades
Para burlarme de la escuela y sus responsabilidades.

Voy a transformarme en grillo o gato
Y a hablarle a los fantasmas que pasan
Y después de un buen rato
Mistificaré el silencio
Hallaré no una, sino tantas realidades.

No hay comentarios:

Publicar un comentario